Contanos quien es Juan Ignacio Martínez.
Tengo 41 años, soy Músico y Docente Argentino. Nací en la Prov. de Buenos Aires pero me crié toda la vida en Caba, precisamente por los barrios de Parque Chacabuco, Flores y Bajo Flores. Ejerzo la docencia en tres niveles: jardín, primaria y secundaria por distintos barrios de la capital: Caballito, Congreso y San Telmo.
Por las noches siempre que se pueda salgo a trabajar como músico, en distintos momentos de mi vida la música siempre me dio un plato de comida. Soy padre de una nena de 9 años y estoy casado. Vivimos en el barrio de Boedo hace 15 años ya.
¿Cómo fue crecer con un tío como Mariano Mores?
Mariano Martínez en realidad, fueron 7 hermanos de los cuales varios se casaron más de una vez y yo soy el hijo menor del más pequeño de sus hermanos. Por este motivo siempre tuve la sensación de que en realidad nunca lograba retenerme ya que éramos muchos sobrinos por recordar. Si bien nos veíamos con frecuencia, la familia era muy grande. Pero claramente influyó en la vida de muchos de mis primos tanto como en la mía por supuesto.En vez de un tío piola y juguetón tuve como frecuencia ensayo de orquestas, teatros, bambalinas, camarines, noches largas y mucha pero mucha música.
¿Tenés interés en otros géneros musicales?
El tango siempre me gustó pero como toco distintos instrumentos tengo mis periodos más tangueros y otros no tanto. En mi formación estudie muchos géneros y me es más fácil decirte lo que no me gusta que describirte el infinito de cosas que si me gustan.
No me gusta la música que le falta el respeto al género femenino cosificando y poniendo a la mujer en situación de un producto que se puede consumir. Como así también la música que recurra a lo burdo y banal siempre hablando desde su literatura. El resto del mundo sonoro me parece que todo tiene su momento y su público. Consumo de todo.
¿Qué anécdotas podes contar de Mariano Mores?
A mi hermano y a mí nos bautizó los cebollitas. Hoy que soy adulto entiendo que era porque no recordaría nuestros nombres quizás. Así nos llamaba. Siempre fue un personaje carismático, y en cada reunión se ganaba nuestra atención. Son tipos distintos. Están en otra frecuencia.Lo recuerdo ensayando, incansable, detallista.
¿Qué anécdotas podes contar de Mariano Mores?
La primera que se me viene es la siguiente: veníamos de una gira de un mes por Latinoamérica, había muchas cartas y sobres en la casa, a él le gustaba abrir uno por uno todo el correo. En uno de los sobres había una carta del director de una película que se filmaría en Estados Unidos y le pedía autorización para usar la música de tanguera uno de sus tangos instrumentales y ponerle letra. Tenían pensado usar la letra de “Roxanne” de Sting. Me mira mí tío y me pregunta: ¿Quién es el tal Sting? ¿Es músico? ¿Es bueno? Lo primero que se me ocurrió fue ponerle en la Tablet un tema de Sting. Para mí sorpresa a los 30 segundos del tema me dice: “muy bueno es un gran artista” Firmó la autorización y al final fue uno de los mejores temas de la película que se llamó “Moulin Rouge!”
¿Desde cuándo ofreces shows en vivo?
A mis 20 y pico de años trabajé mucho tiempo como artista callejero en los subtes y allí empecé a tomar changas tocando en vivo. Cumpleaños, casamientos, lo que sea.
Con el tiempo la docencia me dio más estabilidad económica y ya no hacía cualquier trabajo. Si bien nunca alcanza hoy trato de elegir proyectos que me incentiven tanto en lo económico como en lo musical.
¿A qué edad te llegó el interés por la música?
Estudio desde los 8, 9 años. No recuerdo bien por qué. Solo sé que siempre fui metódico y tengo mucha disciplina, constancia, perseverancia y un día me di cuenta que este era mi talento. No soy talentoso en lo musical si no que mi talento es ser consecuente y tener perseverancia. Son cosas distintas
¿Te interesan otros aspectos musicales como la composición?
Me interesan, y a veces me sorprenden algunas ideas. Pero nunca les dediqué el tiempo que merecen, la vida del músico y del docente es difícil de equilibrar. Los tiempos nunca están en la medida correcta para ambas actividades.
¿Tenés interés por otras disciplinas artísticas?
Sí. Creo que cuando cruzas una línea la creatividad no tiene límites. Me gustan muchas actividades. Lo audiovisual me gusta, también de joven tenía la costumbre de pintarme la ropa. Me encanta hacer trabajos del hogar, creo que requieren ingenio y creatividad más si no tenés un mango. Todo lo que venga del mundo de las ideas me atrae.
¿Cómo es el público de Todo Mundo?
En Todo Mundo con los chicos que trabajamos tenemos un dicho. «No hubo nunca una noche igual a otra». Es inexplicable, puede estar el bar lleno y que no nos den bola como podemos romperla con una mesa sola. Creo que depende de muchas cuestiones personales y externas que hacen a la noche misma de San Telmo.
Lo que sí es característico de todo mundo es ese turista Under que cae de barrilete y se va feliz con una sonrisa de oreja a oreja.
¿Qué aprendiste de trabajar en un circuito tan variado como el de la ciudad de Buenos Aires?
Aprendí a tener cuidado con los barman. Te pueden jugar una mala pasada si no te das cuenta. 😉
Un deseo
Que todos podamos trabajar con dignidad.
Tu lugar en el mundo
Creo que lo importante es con quien y como en lugar de donde. Me da lo mismo donde siempre que esté con mi familia y haciendo lo que amo.
Una película
“El hombre de la máscara de hierro.”
¿Cómo analizas el impacto de la pandemia en el Mundo del espectáculo?
Revolución, o te adaptas o sos cartera. Creo que hay cosas que vinieron para quedarse. Algunas muy positivas otras necesitamos tiempo para hacer un análisis más certero.
Tu experiencia con el formato streaming.
De hecho me gusta cada tanto patear el tablero, que todo cambie. Tanto en la docencia como en la música me vi obligado a re inventarme. Me gusta aprender, soy curioso y me encanta la tecnología aunque no así las redes. No es algo que aprecie las redes virtuales. Pero si la tengo. El problema claramente es nuestra económica imposible para poder invertir en estas cosas. Por más que nos capacitemos esta todo atado con alambres. Desde las redes de wifi hasta los dispositivos con los que contamos. Es una carrera imposible.
Más allá de esto nos fue muy bien con el formato streaming.
¿Cómo piensan que será el regreso a los escenarios y al de Todo Mundo particularmente?
A largo plazo de a poquito se volverá a la normalidad aunque algunas cosas queden como podría ser las transmisiones, los pagos electrónicos y esas cosas. Quizá quede también algún protocolo a seguir de acá adelante para siempre. Puede ser. Generalmente trato de ver las cosas positivas que traen estas cosas.
Más allá del dolor por una pérdida o el ajuste de cinturón que hicimos todos también hemos vivenciado algunas cosas positivas. Cada uno en sus ámbitos habrá explorado distintas vivencias. Yo sufrí un montón de cambios y algunos son positivos. Muchos no, pero algunos sí. Estos espero que hayan venido para quedarse. La realidad de la noche tanto en Todo Mundo como en cualquier lugar tendremos el desafío de ahora en adelante de consensuar lo entre todas las partes interesadas. Ya sea músicos actores, empresarios, dueños, etc. No es fácil pero con respeto y esfuerzo se puede lograr el buen clima de trabajo que siempre nos caracterizó entre todos.